Amor milonguero

Galán que abraza y conduce,
muero de ganas de bailar otra tanda contigo,
sentir tu respiración acompasada
y el latir de tu corazón tan mío, tan mío.

Sueño que el tiempo se detiene,
y que estos instantes de pasión no terminan,
alarga violin con tu arco este tango,
que entre sus brazos vivo.

Retumba tu voz en mi pecho,
como este fuelle rezongón y rítmico,
condúceme siempre milonguero mio,
quiero reflejarme en tus ojos tan divinos.

Tu fuerte y decisiva caminata,
me transporta a este sueño tan idílico,
que es bailar en los brazos
de un amor tan cercano y prohibido.

Mi luna me ama

La luna que alumbra mis noches,
es celestina de milongas y parrandas,
es un farol que desde lejos,
ilumina los contornos del deseo,
y se refleja en el agua mansa.

La luna que me acompaña,
es una dama nocturna acicalada,
vestida de brillo y fiesta,
se asoma al balcón,
para escuchar serenatas.

La luna hermosa me ama,
me abraza para bailar,
sigue fielmente mis pasos,
y escuchamos juntos cada nota,
hasta que nos despida el alba.

Mis sueños e ilusiones

El jardín de mis sueños e ilusiones,
está bordado de rosas,
sus tallos tienen espinas
que me hieren profundamente,
pero la fragancia y los colores
sanan mis heridas.

El bosque de mis sueños e ilusiones,
está lleno de una fauna diversa,
algunas fieras acechan mi camino,
pero el cantar de las aves las calma,
las hace dóciles y amistosas,
acaricio su terso y suave pelaje.

El cielo en mis sueños  e ilusiones,
tiene días despejados y claros,
pero también aterran las tormentas,
truenos y vientos que amedrentan,
pero la calma de la mañana serena,
tranquiliza mis miedos y ansiedades.

El camino de mis sueños e ilusiones,
atraviesa praderas y frescas arenas,
también sortea abismos y precipicios,
que dan vertigo al asomarse,
pero el paisaje es tan hermoso,
que mi mente vuela, corre y salta.

El barco de mis sueños e ilusiones,
esta rodeado de aguas cristalinas y cálidas,
circundado de una fascinante vida acuática,
de veloces corrientes y mareas agitadas,
y sin esperarlo, llego a buen puerto,
a un remanso mar o un paradisíaco lago.

Tarde melancólica y gris,
permanece esta llovizna,
luego este aire limpio,
que respiro profundamente,
¡y suspiro!

Un piano parece ambientar
esta tarde de otoño conmovedor,
que en su aliento frío
aún invita a reposar
¡y contemplo!.

Tiempo para navegar el espacio,
como esta ave en libertad,
quien me enseña a vivir,
a disfrutar sin afán,
¡y gozo!.

.

En este calmo y tranquilo amanecer,
reflejándome en tus ojos cristalinos,
acaricio tu pelaje terso y suave
que me brinda tranquilidad y gozo.
Tu ronroneo es el sonido
del amor sincero,
y tu escarceo felino,
me anima día a día.
Descansa en mi pecho,
arrúllate con mi respiración,
y compartamos esta vida juntos.

NUNCA MÁS

La represión de las libertades,
el aniquilamiento del deseo,
la desertificación de la cultura y el arte,
seno mismo de la sociedad.
Una guerra entre el intelecto
y los nefastos íncubos de la muerte,
escucho un coro que dice,
¡nunca más!
grita un pueblo unido,
¡nunca más!

Giran en torno a la pista,
seducidos por la alegría
de esa milonguera melodía.

Se enaltecen los ánimos,
con el ritmo efervescente,
que percute el bandoneón.

Como los pies dibujan en el suelo
tonos y notas felices,
de colorido y festivo andar.

La milonga es una morocha,
que va conquistando corazones,
con su coqueto bailar.

Llevo grabado en mi mente,
un gran mapa del mundo,
de lugares lejanos y su linda gente,
sus sabores y sus perfumes.

Llevo grabado en mi piel,
la topografía de los cuerpos,
delicias de carne y hueso,
fuentes de amores y pasiones.

Llevo grabado en mi memoria,
las notas, ritmos y melodías,
de varias asombrosas culturas,
acordes de una música universal.

Llevo grabado en las plantas de mis pies,
que recorrieron muchos caminos,
calles, plazas, valles, playas y montañas,
soñados rumbos y destinos.

Esta flor que nace en otoño,
la he de dedicar sin cortar
de la planta que me la regala
en este día cálido y radiante,
a quien me abrace sentidamente,
regalándome en su aliento
suspiros de verdadero amor.

Esta hoja que cae del árbol,
la guardaré en el libro que leo
en mis largas horas de eterno divagar,
forzado a encerrarme en mi ser,
esta hoja disecada y frágil,
ejemplo de vida y muerte,
me recordará la alegría de vivir.

Esta imagen de idílico paisaje,
la albergo en mi memoria
y en mi profundo querer,
sierras teñidas y fulgurantes,
atraviesan este valle que he recorrido,
donde las horas pasan como la brisa,
que ondean las crines de los caballos.

Rompen las olas contra el acantilado
y las gotas.. se esparcen en el aire
como los sueños desvanecidos
en el futuro que se esfumó.

Impulsa el viento las astas del molino,
girando lentamente y poco a poco..
libera su tímido movimiento
retenido y contenido en el tiempo.

El sol irradia su luz omnipresente,
y los girasoles lo enfrentan para admirarlo,
componiendo así la gran obra maestra
que un artista plasmó.

Siembra el labriego en la tierra abonada,
las semillas cosechadas en la previa estación.
Germina una vez más la vida asombrosamente,
como entre las personas renace el amor.

Premonición

Lenguaje impronunciable e inarticulado,
signos impropios y aleatorios,
en claves indescifrables e indecibles,
el artilugio perdió su origen,
como también sus artífices.

La música se tornó ruido,
temblor de notas que ahuyentan,
hiriendo sensibilidades histriónicas,
desarmando los pentagramas
y la oscilación anuncia un cataclismo.

La forma y el color se contaminan
con el aire enrarecido del espacio,
dimensión perdida e inacabada,
los adefesios horripilantes acechan,
el arte es una presa moribunda.

Abierta la ventana de la soledad,
escapan y se liberan las mariposas,
las aves y los agentes voladores,
que permanecían presos
y cautivos por el diario frenesí.

Se escuchan las trompetas triunfales,
de las vencedoras luciérnagas,
agentes luminosos antes apagados
por el olvido y la ciega ignorancia,
que cubría con su armadura  inviolable de frialdad.

La ineludible realidad de lo mínimo,
de lo sencillo y del casual encuentro,
los matices del caparazón y de las plumas iridiscentes,
son ahora el espectáculo grandioso tan esperado,
hemos reforestado el bosque de la felicidad.

Cuan inefables son las nuevas experiencias,
no existe empresa más colosal,
que volver a describir y redescubrir,
la esencia de lo bello y sublime,
de alquímica magia que nos trajo aquí.

Tango que me hiciste tuyo,
tomándome en un abrazo,
acabando mi vida solitaria.
Tu fuelle lamentoso,
acompaña mi respiración,
erizando mi piel con sus violines
largos y melodiosos.
Cuenta mis pasos el piano forte,
retumban en mi corazón,
ese bajo que enérgico
vibra sus cuerdas.
¡Oh tango! que me hiciste tuyo,
eleva mi sentir, trasciéndeme,
acompáñame por siempre.

Encrucijada, indecisión y extravío,
la fortuna es una ruleta traidora
que juega al azar, sin pudor o resquemor,
la vida llega a un punto incierto.

Desprovisto de autodeterminación,
la razón es desechada y los sentimientos,
confusos y difusos como esta bruma
espesa y densa, ocultando la senda.

Naufragados y derrotados,
restan los despojos de la muerte,
o la vitalidad entrará triunfante,
sentada en corceles vigorosos.

Soledad

Soledad que cantada en silencio
me invita a navegar y a divagar,
suspendido en el espacio,
flotando como espora
por el viento esparcida,
en campos ricos y fértiles.

Soledad que me enseñas
el camino de regreso,
a ese yo olvidado en mi vagar,
un soñador perdido en el ayer,
cargado de memorias,
de epopeyas y leyendas.

Soledad compañera fiel,
hermosa musa que me visita
y me confía sus saberes,
enseñándome y develándome,
misterios escondidos
en la caverna de mi ser.

Cuan irrisoria es esta superflua vida,
la superficialidad socavaba,
los sentires genuinos,
los valores verdaderos
y la manifestación del amor,
que se brinda sin contraprestación.

La banalidad choca ante el muro,
la sólida pared de la enfermedad,
antes el lujo sin mesura
y el despilfarro, la vida es una sorpresa,
una gran marea que nos sostiene
y nos hundirá sin avisar,

Detenido el ritmo desmesurado ,
la producción artificial y depravada,
¿sucumbirá la mentira de la usura?
¿claudicará la plástica vida?,
deteriorada por un agente natural,
que nos despierta de un maléfico proceder.

Las gotas caen con la cadencia
golpeando el tejado,
ejecutando la música que calma,
las ansias y la desolación.

Las hojas brillan su verdor,
seres que nos recuerdan,
que este es un capítulo más,
de este libro llamado vida.

El viento ha cesado,
las aves cantoras,
celebran el aire limpio,
y un nuevo amanecer.

La mutación del color,
anuncia la llegada del otoño,
la lluvia humectará,
la tierra y a cada ser.

La majestuosa cúpula celeste
nos cobija a todos,
en un gran abrazo cálido,
y los astros brillarán, en  todo  su esplendor.

A mis hijos

Mirarme en tus ojos puros,
reflejarme en tu mirada serena,
de ser que solo brinda amor,
maravillosa creación,
que naturaleza tan noble,
que vida más plena,
abrazándote sueño,
correr libre por praderas y senderos,
que me enseñaste a vagar,
con tu andar feliz.

Inocencia robada

Inocencia robada, vida trastocada,
la flor que no llego a su esplendor,
ha sido mancillada,
¡oh! seres ruines y viles.
¿Qué han sido de los sueños?,
¿y de la niñez truncada?.

Inocencia robada, ilusiones desvanecidas,
el fruto tierno y fresco,
arrancado antes de madurar,
¡Oh! bestias que desgracias vidas.
¿Qué ha sido de la ternura y la pureza?,
¿y de la promesa del mañana?.

Rapto, violación, tortura,
asesinato y desamor,
venenos que matan y matan...