Garúa que caes como sollozo
testigo de amores y sinsabores
que un fuelle al expandir
luego exala como suspiro
cúmulos de penas, de anhelos
de tristeza o melancolía profunda.

Garúa que lavas y reposas como brillantes
sobre esa flor no dedicada a un amor
brilla con la luz de un nuevo amanecer
cuando un piano cuente los pasos
y un bajo en su grave voz
los haga pesados como los recuerdos.

Garúa que con paz y suave murmullo
golpeas el tejado y las superficies de cristal
copas levantadas para brindar
en el tañido de un violín
que se torna ritmico y febril
como los encuentros apasionados

MAÑANA LLUVIOSA

Fría mañana, el aire de la respiración,
se entiende en el entorno diáfano y melancólico,
adornada a penas por los diamantes que adornan,
cuando la garúa reposa sobre las hojas y las flores,
y sobre el pelaje de mis alegres amigos,
alienando así al cruel enemigo
que con voracidad ígnea, tanto destruyó.

Mañana de primavera, que alimentas la imaginación.
oh aire limpio de ingenuo de despertar,
la luz a penas penetra en la espesa bruma,
los seres merodean expectantes del devenir.
Melódico octubre de notas en odas a la lluvia
que sana esta fértil tierra maltratada,
lava las heridas que el odio causó.

Mañana húmeda con olor a musgo y renovada canción,
lucen de gala las ramas con escamas y guirnaldas vivas,
moda nostálgica de tiempos de vida,
vuelve a vestir las curvas de las doncellas,
con este fresco verdor que alegre visten coquetas,
si el amor ronda y engalana la vida bucólica,
que ajena a la codicia, su monte vivió.