El humo sale de su boca
y dentro de los límites de las horas
admiro desde abajo su grandeza
y el olor de su piel embriagante
que me lleva a un trance
sus ojos escudriñan mi interior
y conoce mis deseos
el erotismo tiene magia,
el poder de controlar
hasta el latido del corazón,
la intensidad de la respiración
en este juego de roles
lleva compromisos de entrega,
termina en la total voluntad
de perderme en su dominio.