Este elixir tanino parece mezclarse

con el velo oscuro de la noche

que esparce sus estrellas

sobre un ser taciturno

que revive entre las linternas,

artilugios que alumbran

las largas noches de insomnio.

Insuficientes son las horas

cuando la mente lucubra

universos misteriosos e insondeables,

revelados a través de estados

irrepetibles de aparente lucidez,

que permiten borrar las fronteras

entre las luces y las sombras.